sábado, 10 de enero de 2015

Jamás te ames menos de lo que amas al otro...

A veces me pregunto porque el amor es tan cruel, te ama quien no puedes amar, y amas a quien no te quiere, y sin embargo allí estamos, amando a esa persona que esta muy bien sin uno, sufriendo por esa persona, pensándola a cada segundo, extrañándola, y esa persona no es capaz de mandarte un mensaje siquiera. 
¿Nunca se han preguntado por qué somos así? Yo sí, quisiera darle mi corazón a alguien capaz de cuidarlo y quererlo, y no derramar lagrimas por hombres que simplemente jamás me sabrán valorar, ¿a ustedes no les pasa?
A veces uno solo se cansa de elegir tan mal. Y sin embargo, sigue cometiendo los mismos errores, y no es capaz de salir del circulo vicioso, pues un solo mensaje de esa persona te saca una sonrisa de 24 horas. 
¿Cuanto poder le damos al otro sobre nosotros mismos? Cómo puede ser que una persona que antes no estaba en nuestras vidas y de la cual desconocíamos su existencia de pronto tiene el poder de hacernos sonreír como tontos, o de llorar toda la noche sin siquiera habernos pedido tal poder?
Pues sí, el amor es concederle a otro poder sobre nosotros mismos, el poder más grande y fuerte que existe, el poder de la dicha, y el poder del dolor, el poder de la felicidad, y el de la tristeza, el poder del cariño y el poder del odio. 
Cuando amamos somos tan felices, tan dichosos, queremos tanto, pero también odiamos con tal intensidad que solo puede ser equivalente a la del amor, ¿quién no ha odiado a quien a querido arrebatarles al objeto de su amor? ¿quién no ha odiado a otra persona por el simple hecho de que esa persona a la que amas la haya puesto primero? ¿quién no ha odiado a esa persona que ama por herirnos tanto? ¿quién no se ha odiado a si mismo por amar tanto a alguien que no nos merecía? 

El amor es tristeza, nostalgia, dolor, un dolor más intenso que el de una raspadura en la rodilla o un golpe en el codo, un dolor que parece no cesar, pues la única persona capaz de arrebatarnos ese dolor es el mismo causante de él. 

Pues sí, el AMOR es PODER, aún así seguimos amando una y otra vez, pues una vida sin amor es tan triste, aburrida y vacía, que al menos el dolor nos hace sentir llenos de algo, con la esperanza de que algún día el objeto de nuestros sentimientos nos corresponda y sea el indicado.
¿Esta mal amar? o claaro que no! No es malo amar!! aquí su servidora les asegura que es un poder que debemos seguir entregando y dando porque es una de esas pocas cosas bellas que hacen que valga la pena vivir, cada cicatriz es un aprendizaje nuevo, pero no debemos olvidar que el amor es poder, y como tal una responsabilidad. No lo entregues a cualquiera por simplemente entregarlo, que esa persona lo merezca, que esa persona te merezca, o que al menos tú creas que lo merece, pues entonces valdrá cada lagrima que derrames, y si no funciona podrás decir "yo lo intente al menos".

Pero mi consejo más importante no es ese, sino que te ames a ti mismo como a nadie, entrégate a ti mismo el poder de levantarte y ser feliz, pues sí te amas a ti mismo como mereces entonces no habrá nadie con más poder que tú mismo para herirte!! 

El AMOR PROPIO es tan importante como el amor de pareja, e incluso más, date el poder de ser dichoso, sentirte bien, de quererte, de levantarte solo sin depender de otro, y pues si, también ama a los demás, ama a esa persona especial que te saca sonrisas y entrégate de lleno, pero jamás te ames menos de lo que amas a esa persona, porque de lo contrario, le estarás dando el poder para destruirte.

Angie 



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